Concurbión. Cee está al otro lado, la Ría de Concurbión finaliza en una playa que se conoce como la de Cee. La Ría entra de sur a norte, la orilla del este o de la derecha es Cee, el opuesto es Concurbión.
Las fotografias nos enseñan el color de la mañana y el estado del tiempo. Brumoso a esa hora de las 8,15 de la mañana, más tarde el sol se encargaría de evaporar o levantar esa bruma.
El color gris sobrecoge, acompaña la temperatura de estas horas de la mañana, embellece el paisaje y la fotografía. La torre de la iglesia de San Marcos vigila la población y llama a los peregrinos a llegar a ella.
Ya estamos delante, es una pequeña iglesia de estilo Gótico Marinero, le llaman. Desde allí nos tiramos al monte.
Ya estamos delante, es una pequeña iglesia de estilo Gótico Marinero, le llaman. Desde allí nos tiramos al monte.
Recios muros de piedra orillan la vía de acceso y subida.
Parando a tomar aliento hay que volver la vista atrás y disfrutar del paisaje, Concurbión en primer término, la ría después y Cee al fondo.
Parando a tomar aliento hay que volver la vista atrás y disfrutar del paisaje, Concurbión en primer término, la ría después y Cee al fondo.
Desde lo 0 metros del nivel del mar subimos por el monte hasta los 100 m de nivel, será la máxima altura de esta etapa, a excepción de los 110 m de altura del faro de Finisterre.
Son las 9 y media h cuando bajo a la playa de Estorde; a las 8,15 h comenzaba a caminar en Cee, he caminado 5 kmt.
Como en anterior ocasión, las gaviotas ocupan la arena, buscan el desayuno.
Estamos a nivel de playas, los hoteles y áreas recreativas hacen acto de presencia.Un kmt después de la playa de Estorde llego a la de Sardiñeiro, ésta más grande pero igual de sola a estas alturas del tiempo y de la hora.
Recorridos los 600 m de playa llego al pueblo y tras ser visitado este hay que volver al monte, hasta un nivel 80 m. y llegar a carretera nacional.Por el arcén accedo a un mirador con unas inmejorables y expresivas vistas naturales.
Caminar por el agua de Langosteira es una costumbre peregrina.
Y en la arena escribí dos nombres, el del que viene...
.. y el del que quedó atrás.
Después de recorrer los 2 kmt de playa, entre el final de ésta y el comienzo del pueblo se halla este cruceiro conocido como el de Baixar.
En el Albergue Cabo da Vila me alojo, en la entrada por calle principal.
Y... tras la frescura de la ducha.... algo mejor que esto?
un buen paseo por el puerto de Fisterra, ha quedado un excelente día.
Y hay que repetir las buenas costumbres al llegar a Fisterra...., un buen arroz con bogavante.
El pueblo de Finisterre está ubicado en la cara este de la península del mismo nombre, pues en la cara opuesta, en la oeste está la playa del Mar de Fuera (Mar do Fora).
Esta playa está catalogada como muy peligrosa. Está abierta al Atlántico y hay una fuerte corriente circular que arrastra a los bañantes mar adentro, desgraciadamente tiene víctimas de peregrinos en su historial.
Una horita por esta playa es un buen tiempo de estancia para conocimiento y disfrute, no la conocía.
Volví al pueblo y a la carretera de acceso al faro para ver la puesta de sol, los 3 kmt se hicieron breves, me encontraba bien, comer dar fuerzas.
En poco más de 30' estaba junto el cruceiro del faro. El excelente día y visión me hizo mirar al norte, al monte que estaba a mis espaldas y me animó a subir a él para tomar buenas vistas del faro.
Esto nunca lo había hecho, sí recuerdo que la primera vez, en el año 13, subí unos metros y a la vista del faro escribí la nota del encuentro de "las dos miradas". Ahora subí algo más hasta encontrar esta estupenda vista del faro, había calima que impedía ver la línea del horizonte, pero la puesta de sol iba a ser muy buena.
Hacerse foto junto el hito del kmt 0 es algo obligado y tradicional, antes había tomado una "caña" en el bar anterior a este lugar, volvimos a encontrar nuestras miradas y a expresar una sonrisa.
Prácticamente todos eran peregrinos, disfrutaban del final de un día, de un camino de muchos días, de un viaje de cientos, miles de kmt desde su ciudad de origen, para muchos de ellos hoy era un día inolvidable, de sentir emociones diferentes que quedarían grabadas en sus recuerdos.
Este video fue hecho con fotos tomadas en Finisterre y Muxia.